El pasado lunes 25 de julio, en el sevillano barrio de Bellavista, se concentraron en los exteriores del hotel Doña Carmela representantes del sindicato SAT y trabajadores y trabajadoras del sector de la hostelería en apoyo a las represalias que las trabajadoras de la limpieza del Hotel Luna de Granada (cadena Sercotel) han denunciado que vienen sufriendo desde hace meses.
La concentración se desarrolló con la intervención de la policía por petición de la dirección del hotel, la cual aseguró «no estar en las mismas condiciones que el hotel de Granada» señalando a los manifestantes en apoyo de las empleadas por estar en la puerta de sus instalaciones protestando, ya que según la empresa, la concentración «estaba causando un perjuicio con las personas alojadas».
Esta concentración, tras la ya celebrada en el Hotel Gran Fama de Almería, se circunscribe dentro de la campaña solidaria que está desarrollando el Sector de Hostelería del sindicato SAT frente a las sedes de la multinacional hotelera SERCOTEL y para hacer llegar a trabajadores y usuarios que en Granada existe un hotel donde una parte de su plantilla, la que corresponde a las camareras de pisos, prácticamente carece de derechos laborales.
Los actores de tal abuso perpetrado a plena luz del día son cuatro: SERCOTEL, una operadora transnacional; el Grupo Luna, una empresa de especuladores inmobiliarios con ínfulas de hoteleros decentes y de mecenas a costa del sudor de sus trabajadoras; ATE Sistemas y Proyectos Singulares, una banda de pilla tigres que se benefician con la cesión ilegal de trabajadoras y la UGT en la persona de unos de sus responsables de Hostelería, Miguel Ángel Prieto, un personaje siniestro, siempre arrimadito al calor de las empresas y tan cercano al sindicalismo de clase como un petardo de feria a un cohete espacial.
En las próximas semanas y meses, esta campaña contra SERCOTEL se extenderá por más centros de trabajo de Andalucia.