¿SUPERPARK? SULAYR

Comienzan a aparecer las noticias de la inminente apertura del Superpark Sulayr. No sabemos hasta que punto son ciertas mas allá de unos pocos módulos en algún sector.
Desde el SAT Sierra Nevada, esperamos la buena noticia de que por fin este año los trabajadores del parque reciban su salario y coticen a la seguridad social.
Llevamos 2 años denunciando esta situación y la pasada temporada la Inspección de Trabajo de Granada pudo comprobar los hechos en respuesta a una denuncia de este sindicato.
Hasta ahora la situación de estos trabajadores era una máscara de voluntariado fraudulenta. Supuestamente se trataba de voluntarios de la Federación Andaluza de Deportes de Invierno que recibían como contrapartida por su trabajo a tiempo parcial,
el pase de temporada.
Desde el Sindicato Andaluz de Trabajadores, consideramos una auténtica vergüenza que una empresa pública recurra a argucias de este tipo para eludir sus obligaciones mas básicas con los trabajadores, como son el alta en la seguridad social y el pago de una nómina. También consideramos vergonzosa la colaboración de la Federación Andaluza en este fraude. ¿A qué intereses responde? ¿A los de sus deportistas y clubes integrados?
¿O a los intereses comerciales de su presidente en Sierra Nevada?.
Trabajan los obstáculos a pico y pala.
Obstáculos a los que se puede acceder previo pago del pase de remontes de CETURSA Sierra Nevada, no por estar en posesión de licencia federativa alguna o tratarse de una competición oficial de dicha federación.
Las órdenes y el material de trabajo provienen de CETURSA.
Que se emplean sus instalaciones como almacenes y se apoya el trabajo con las máquinas de pistas.
Maquinas de pistas que se emplean para trasladar trabajadores y sus herramientas a los puntos de trabajo asignados, a pesar de contradecir las normas de seguridad del fabricante de estas máquinas no aptas para el transporte del personal en la parte trasera.
En definitiva, el trabajo de estas personas genera un valor en el producto que ofrece la empresa CETURSA Sierra Nevada, el pase de remontes, pago del cual es el requisito único para acceder a la instalación y por tanto, deben ser trabajadores los que acondicionan el parque, como los que acondicionan las pistas, contratados en las mismas condiciones por la misma empresa.
Insistimos es que es vergonzoso que esto suceda en un empresa pública de la Junta de Andalucía donde la pasada temporada “trabajaron” entre 20 y 30 personas en estas condiciones y creemos que es necesaria una explicación pública de la Consejera Delegada de la Junta, máxima responsable de velar por los intereses del pueblo andaluz y el cumplimiento de toda norma legal dentro de esta empresa y responsable política de que se produzcan hechos de este tipo.

(Crónica) MANIFESTACIÓN EN GRANADA POR LA READMISIÓN DE LOS COMPAÑEROS DESPEDIDOS EN JARDINES ALBERTO

Con la manifestación de este sábado 13 de diciembre, el SAT-Granada ha dado un paso más en la lucha por la readmisión de los tres compañeros despedidos del Restaurante Jardines Alberto. Se cumple ya un mes y medio de campaña por la readmisión de los compañeros, despedidos como represalia por secundar la huelga del sector de la hostelería de Granada, a finales verano. Una huelga que fue convocada para defender nuestro Convenio.

A las 12 horas, unas 200 personas salían de la Pz. Del Carmen. Se corearon consignas como “¡Readmisión, compañeros despedidos!”, “¡Jardines Alberto, explota y despide!” o “Así, Así, ni un paso atrás, contra los despidos, ¡lucha popular!”. En el trayecto, se hicieron varias paradas para denunciar públicamente la precariedad extrema en la que se encuentra el sector. Granada ha sido la provincia que más ha crecido de Andalucía en beneficios. Pero para la clase trabjadora lo único que ha crecido ha sido la precariedad, los bajos salarios y las jornadas interminables. Y como colofón, se despide a tres trabajadores por hacer huelga, vulnerando un derecho básico que costo tanto sufrimiento conseguir. Todo esto con el telón de fondo de la ruptura de la negociación del nuevo convenio, para el que la patronal pide una rebaja salarial del 40% y el fin de la ultraactividad. Por lo visto, no les basta con vulnerar todos los días el convenio vigente.

Al llegar la manifestación a Jardines Alberto (que “casualmente” se encontraba cerrado) se leyeron comunicados contra la actitud caciquil de la empresa y su gerente, por el derecho a huelga, por unas condiciones de trabajo dignas en el sector y por la solidaridad de clase como respuesta a la ofensiva de la patronal que estamos sufriendo en Andalucía y el resto del estado. Intervinieron: José Juán, por la Asamblea Interprofesional, Mari Carmen García Bueno, Secretaria de Organización del SAT-Sevilla y Secretaria de Relaciones Internacionales, Curro Moreno, Secretario de Organización del SAT-Jaén, y Daniel Galdeano, Secretario de Acción Sindical del SAT-Granada y uno de los trabajadores despedidos en Jardines Alberto.

Con la manifestación no acaba todo. Con esta acción, l@s compañer@s de Hostelería del SAT de Granada, inician también una campaña a pie de tajo, informando sobre nuestro Convenio y llamando a la organización para defender nuestros derechos. Los compañeros de Jardines Alberto, por otro lado, están decididos a seguir adelante, más firmes que nunca, arropados por el calor y la solidaridad de numerosas personas y organizaciones solidarias que nos han brindado su apoyo en este mes y medio de movilizaciones.

¡READMISIÓN DESPEDIDOS EN JARDINES ALBERTO!
¡POR UNAS CONDICONES DE TRABAJO DIGNAS EN LA HOSTELERÍA!
¡LA LUCHA ES EL ÚNICO CAMINO!

Sábado 13 de Diciembre: Manifestación en apoyo a la lucha por la readmisión de los compañeros en Jardines Alberto

Sábado 13 de Diciembre: Manifestación en apoyo a la lucha por la readmisión de los compañeros en Jardines Alberto

El sábado 13 de diciembre subimos al restaurante Jardines Alberto por la readmisión de los tres trabajadores despedidos por la huelga en defensa del convenio de hostelería y por la dignidad del sector.
NINGÚN DESPIDO SIN RESPUESTA!!
NOS TOCAN A UN@, NOS TOCAN A TOD@S!!

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En la calle tras secundar el paro de la hostelería

En la calle tras secundar el paro de la hostelería

Secundar la huelga en defensa del convenio colectivo de la hostelería les ha costado el puesto a tres trabajadores de Jardines Alberto. Así los denuncian los afectados, a los que, al parecer, el conocido restaurante, situado a escasos metros de las taquillas de la Alhambra, ha puesto en la calle “de forma injustificada” como presunta “represalia” por haberse sumado a los paros convocados los pasados 29 de agosto, 10 y 11 de septiembre, recriminan.

Los ya ex empleados, del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), defienden la “nulidad” de su despido al entender que “vulnera el derecho a huelga con el agravante” de que uno de los ceses se ha producido contra el delegado de la sección sindical. Para que esta “injusticia” no quede “impune” han emprendido acciones legales contra la empresa, a la que exigen su readmisión, y han iniciado una campaña sindical con piquetes informativos frente al negocio.

Los hechos se remontan al pasado agosto, cuando semanas antes de la huelga de la hostelería parte de la plantilla –nueve de los alrededor de quince empleados- celebraron una asamblea para decidir su postura ante el conflicto. Muchos condicionaron su decisión “a la actitud que adoptara la empresa por la situación de miedo generalizada en la hostelería”, cuentan Samir Amar, Daniel Galdeano y Francisco Vázquez, los tres afectados. “El metre como portavoz pidió al gerente que se posicionase porque, aunque se trata de un derecho reconocido en teoría, sabíamos que en la práctica podía haber represalías. La empresa traslada que se respetará la huelga y que únicamente se descontará el día de salario a aquellos que la secundasen, como marca la ley”, detallan.

Siete trabajadores deciden entonces sumarse a la huelga y un octavo muestra su apoyo. “A raíz de ahí el clima en el restaurante cambia” y los responsables de la empresa “empiezan a presionar psicológicamente a la plantilla para crear un ambiente de división entre los buenos que habían defendido sus intereses y los malos”, lamentan estos jóvenes, para los que la actitud de Jardines Alberto “jactándose de la caja que habían hecho ese día” contrasta con la de la mayoría de los negocios de la Alhambra, “donde el seguimiento del paro fue masivo”.

Así llega el primer despido, un día antes de la segunda jornada de paro. “Me llamó el gerente y me preguntó si iba a secundarla. Ante mi respuesta afirmativa me contestó que cogiera ese día libre y el mes de vacaciones para finalizar mi contrato, mientras incidía en que la decisión no se debía a que me sumara a la huelga, sino a la bajada de clientela”, cuenta Samir Amar, con un contrato eventual en ese momento, tras encadenar “tres años como extra”.

Tanto para él, como para sus compañeros, el ‘argumento’ esgrimido por la empresa “cae por su propio peso”, ya que al día siguiente “llamaron a dos extras que echaron todo septiembre”. “Ante la tensión y el miedo que generó su despido, la plantilla reculó en las siguientes jornadas de paro”, a las que solo se sumaron los tres (Samir ya sin empleo). “Eso nos señaló claramente”, afirma Galdeano, el segundo en perder su puesto.

Según cuenta, tras una inspección de oficio se “coacciona a la plantilla para que firme cuadrantes falsos” con intención de demostrar que no sobrepasaban las horas de trabajo y se reducían los descansos “cuando no era así”, por lo que ambos se niegan. La inspección también obliga a hacer fijos discontinuos a los eventuales, cosa que la empresa cumple con todos salvo con Galdeano al que “allí mismo” despiden para “amedrentar al resto”, advierte.

Vázquez se encontraba en el “punto de mira” cuando el SAT “legaliza la sección sindical” del restaurante con él como delegado. Tres días después –y en mitad de su descanso- la carta de despido llega al pueblo donde residen sus padres. “Me llamó mi familia para darme la noticia”, explica aún atónito por la “surrealista situación”.

De momento, los tres actos de conciliación han concluido sin acuerdo, ya que“la empresa reconoce el improcedente y ofrece dinero”, pero se niega al nulo, afirman los tres afectados, extremo que la empresa no ha confirmado al declinar hacer declaraciones, ya que el caso “está en manos” de su abogado. Acusa, no obstante, a los trabajadores de “manipular la verdad”. “Si tan mal se les ha tratado por qué insisten en su readmisión”, se pregunta el gerente.

Para los tres exempleados esta petición es cuestión de “justicia”. “Detrás de la estampa de la Granada del crecimiento turístico se esconde la cruda realidad laboral del sector”, se entristecen. La “precariedad” se está “normalizando” con la crisis, a la que muchos empresarios “se aferran” para “llenarse los bolsillos a costa de ampliar jornadas, reducir salarios y eliminar el contrato de la ecuación”, denuncian. “Si los trabajadores de la hostelería no nos levantamos, no habrá futuro”, defienden. Para subrayar sus palabras han convocado una concentración el 13 de diciembre, a las 12.00 horas, en la plaza del Carmen, no solo por lo que les ha sucedido, “también por la situación de la hostelería en general” .

En la calle tras secundar el paro de la hostelería